Puede ser el resultado de un milagro divino. O quizá no. Pero existen y se pueden visitar. Un grupo selecto d e santos fallecidos hace años e incluso siglos, conservan sus cuerpos tan frescos como si éstos todavía tuvieran vida. Se dice que poseen características sobrenaturales que hoy en día no han obtenido explicación científica. A pesar de que la Iglesia Católica reniegue de tales rarezas, estos santos mantienen el color de la sangre como si fluyera todavía y sus cuerpos desprenden un olor dulce que provoca el desmayo de los transeúntes que los visitan. CDH te ofrece la oportunidad de analizar todo cuanto se ha sabido sobre este fenómeno. No te lo puedes perder.
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