miércoles, 30 de enero de 2013

ERES UN ANGEL PARA ALGUIEN

Había una vez una niñita sentada en un parque. Todos pasaban por su lado y nunca nadie se detenía a preguntarle que le ocurría. Vestida con un traje descolorido, zapatos rotos y sucios, la pequeña niña se quedaba sentada mirando a todo el mundo pasar. Ella nunca trato de
hablar, no dijo una sola palabra. Muchas personas pasaron pero nadie se detuvo.

Al día siguiente yo decidí volver al parque a ver si la pequeña niña estaba ahí. Sí, ¡ahí estaba!, en el mismo lugar en el que estaba ayer. Con la misma mirada de tristeza en sus ojos.
Me dirigí hacia ella. Al acercarme noté que en su espalda había una joroba. Ella me miró con una tristeza tan profunda que me rompió el alma. Me senté a su lado y sonriendo le dije: "hola". La pequeña me miró sorprendida y con una voz muy baja respondió a mi saludo.
Hablamos hasta que los últimos rayos de sol desaparecieron. Cuando sólo quedábamos nosotros dos y todo era oscuridad alrededor, le pregunté por qué estaba tan triste.

La pequeña me miro y con lágrimas en sus ojos me dijo: "porque soy diferente".
Yo le respondí con una sonrisa: "lo eres".
Y ella dijo aun más triste: "lo sé".
Le contesté: "pequeña, ser diferente no es malo. Tú me recuerdas a un ángel dulce e inocente".

Ella me miró… se sonrió y por primera vez sus ojos brillaron con la luz de la alegría.
Despacio se levanto y me dijo: "¿es cierto lo que acabas de decir?"
Le respondí: "eres como un pequeño ángel guardián enviado para proteger a todos los que caminan por aquí"

Ella movió su cabeza afirmativamente y sonrió.
Ante mis ojos algo maravilloso ocurrió. Su joroba se abrió y dos hermosas alas salieron de allí. Me miró sonriente y me dijo: "yo soy tu ángel guardián". Yo no sabía qué decir.
La niña me dijo: "por primera vez pensaste en alguien más. Mi misión está cumplida".

Me levanté y le pregunté por qué nadie le había ayudado.
Ella me miró y sonriendo me dijo: "tú eras la única persona que podía verme".

¡Y ante mis ojos desapareció!.
Después de ese encuentro mi vida cambió dramáticamente.
Como la historia nos enseña… ¡todos necesitamos a alguien!. Cada uno de tus amigos(as) es, a su manera, un ángel. El valor de un(a) amigo(a) solamente puede ser medido con el corazón.


domingo, 27 de enero de 2013

SIN COTROL

Consejo de los Ángeles:  “La mejor forma de controlar a la gente es animarla a que sea egoísta”
SHUNRYO SUZUKI
Querer controlar a los demás es un comportamiento espantoso que, sin embargo, repetimos continuamente, con mayor o menor sutileza.  Decimos lo que hay que hacer y cómo debe hacerse.  Utilizamos el dinero y el poder para conseguir lo que queremos de otras personas.  Empleamos métodos pasivos-agresivos para manipular la situación con quejas, intentando crear mala conciencia en el otro o abrumándolo con atenciones para que se sienta obligado a correspondernos.  Pero, aunque parezca una paradoja, nunca controlamos tanto una cosa como cuando la dejamos en paz.  Cuando el maestro zen Shunryu Suzuki habla de permitir que los demás sean egoístas, quiere decir dejarles que examinen su vida a su propio ritmo.  Dejémoslos con sus errores y sus descubrimientos.  Basta con observar el proceso.  Cuando lo hagamos así, nos daremos cuenta de que no podemos controlar a nadie.  Lo más que podemos hacer es controlar nuestra necesidad de controlar.  Cuando nos olvidamos de una obsesión – y abandonamos la fantasía de control – al menos podremos controlar a nuestro mejor aliado, que no es otro que nuestra propia mente.
¿Intentas controlar a los demás? ¿Cómo y por qué lo haces? ¿Cómo te sienta que otros lo intenten contigo?  Procura abandonar poco a poco la idea de tener que hacer las cosas de una determinada manera para sentirte cómodo y seguro.  Disfruta de la libertad que proporciona no tener que controlarlo todo.
Meditación de los Ángeles:  No busco controlar, sino comprender

Astrea
AngelReiki

viernes, 25 de enero de 2013

DIOS NUNCA SE EQUIVOCA

Un rey que no creía en la bondad  de DIOS.
Tenía un siervo que en todas las situaciones le decía:
Mi rey, no desanime porque todo lo que Dios hace es perfecto, ¡Él no se equivoca!
Un día ellos salieron para cazar y una fiera atacó al rey.
Su siervo consiguió matar al animal, mas no pudo evitar que el rey perdiese un dedo de la mano.
Furioso y sin mostrar gratitud por haber sido salvado, el Rey dijo: ¿Dios es bueno? Si Él fuese bueno yo no habría sido atacado y perdido mi dedo.
El siervo apenas respondió: Mi Rey, a pesar de todas esas cosas, sólo puedo decirle que Dios es bueno; y `El sabe el porqué de todas las cosas
Lo que Dios hace es perfecto. ¡Él nunca se equivoca!
Indignado con la respuesta, el rey mandó a apresar a su siervo. Tiempos después, salió para  otra cacería y fue capturado por salvajes que hacían sacrificios humanos.
En el altar, listos para sacrificar al rey, los salvajes percibieron que la víctima no tenía uno de los dedos y lo soltaron: él no era perfecto para ser ofrecido a los dioses.
Al volver para el palacio, mandó a soltar a su siervo y lo recibió muy afectuosamente.
Mi siervo: ¡Dios fue realmente bueno conmigo!
Escapé de ser sacrificado por los salvajes, ¡justamente por no tener un dedo!
Mas tengo una duda: Si Dios es tan bueno, ¿por qué permitió que tú, que tanto lo defiendes, fueses preso?
Mi rey, si yo hubiese ido con usted en esa cacería, habría sido sacrificado en su lugar, pues no me falta ningún dedo.
Por eso, recuerde: todo lo que Dios hace es perfecto:
¡Él nunca se equivoca!
Muchas veces nos quejamos de la vida y de las cosas aparentemente malas que nos pasan, olvidándonos que nada es por  casualidad y que todo tiene un propósito.
Todas las mañanas, ofrece tu día al Señor Jesús.
Pide a Dios inspirar tus pensamientos, guiar tus actos, apaciguar  tus sentimientos. Y nada temas, pues ¡DIOS NUNCA SE EQUIVOCA!

miércoles, 23 de enero de 2013

No hay necesidad de sentirse superior o inferior

El Guerrero Espiritual tiene empatía por todo. Otros están atravesando los mismos problemas que tú, así que no hay necesidad de sentirse superior o inferior. Si has experimentado un tiempo dificultoso con tus padres, si te has mudado de tu hogar y has dejado muchos problemas sin resolver con ellos, tal vez te suceda que te despiertes una mañana con el recuerdo de estar en un sueño con tus padres y decirles cómo los amas y compartas con ellos tu felicidad actual. Tal vez tus padres te llamen por teléfono, justo ese día, para decirte cuánto te aman.
Estas cosas suceden cuando estás trabajando conscientemente con el Viajero. No es una coincidencia, aunque lo parezca. Durante el viaje nocturno, podrías estar liberando heridas y resentimientos que has acarreado durante años.
Esto te da un indicio de cómo puede trabajar contigo la Conciencia del Viajero Místico cuando la invitas.
- John-Roger

lunes, 21 de enero de 2013

REFLEXIONES

Una buena educación enseña al hombre que su luz debe proyectarse a otros.

Si la gente pudiera ver que el cambio se produce como resultado de millones de pequeñas acciones que parecen totalmente insignificantes, entonces no dudaríamos en realizar esos actos pequeños.

Utiliza tu mente para mejorar tu vida, no para destruir las vidas de los demás.

En cada uno hay algo precioso que no existe en nadie más.
Por eso: “no menosprecies a hombre alguno”

Lo que no quieres que los otros te hagan a ti, no lo hagas a los otros.

¡No debemos permitir que alguien se aleje de nuestra presencia sin sentirse mejor y más feliz!

Quien comparte generosamente, como por milagro, enriquece la calidad de su espíritu. En contrario, el mezquino que retiene lo que tiene se empobrece día a día.

¿Qué es despertar? Es tomar conciencia de: ¿Quién eres? ¿De dónde vienes y para dónde vas? ¿Qué es lo que has venido hacer aquí?

domingo, 20 de enero de 2013

YO CREO


Yo creo que los milagros pueden ocurrir y ocurren. Yo creo en los milagros que me ocurrirán a mí. Todo lo que tengo que hacer para que algo fuera de lo común ocurra en mi vida es visualizar ese acontecimiento feliz y creer que sucederá, y de acuerdo con mi fe en las leyes del magnetismo mental, ese acontecimiento feliz tendrá lugar en la vida

jueves, 17 de enero de 2013

EL VACIO ES UN REGALO

Cuando nos sentimos vacíos, intentamos llenarnos con rellenos temporales como la comida, las drogas, el sexo o las compras. ¡O intentamos escapar a otro lugar por completo! ¿Vacío en un matrimonio? Buscamos otro esposo/a. ¿Problemas en un empleo? Encontramos otro.
Pero como sabemos, la elevación temporal se desvanece, lo cual nos deja sintiéndonos agotados, y nuestros problemas nos siguen de un consorte al otro y de un trabajo al otro.
Existe sólo una forma de remover el vacío y esa forma es: Cambiando nosotros mismos.
Cuando somos confrontados con el vacio o con un problema, es el momento de comenzar a preguntarnos las interrogantes como: ¿Qué no he estado dispuesto a hacer para crear la vida que quiero vivir? ¿Dónde soy culpable en esta situación? ¿Qué podría estar haciendo diferente?

El vacío es un obsequio del universo diciéndonos: “¡Despierta! Estás en un camino hacia la destrucción. No estás haciendo el trabajo de cambiarte a ti mismo”.

Yehudá Berg

martes, 15 de enero de 2013

¿COMO ENCUENTRAS SIN BUSCAR?

¿Cómo encuentras sin buscar?  ¿Cómo deseas a Dios y lo haces sin deseo?
El deseo de Dios es no deseo porque es la realidad sin manifestar. Sólo puedes desear aquello que se manifiesta y ese deseo se convierte en una trampa. Siempre lo ha sido.
Tú has estado y estás en mis oraciones por la Luz, la verdad y la fortaleza de tu buen propósito.
Confía en que la forma que es el mayor bien ya ha sido preparada, aunque no carece de pruebas mientras pasa por este mundo. Con cada una de las pruebas, se descubre y comprueba que estamos listos, dispuestos y que eligiendo mantener la fe en todo el camino de nuestro triunfo en el Espíritu.
Te dirijo, no te te insisto, ya que eso te corresponde, a tu corazón y tu Alma adonde reside un maestro interno, que también puede comulgar con tus pensamientos, formas de ver y la expresión en el mundo. Entonces, puedes saber que hay una superación que espera a todos aquellos que sirven al Señor con confianza.
Debes ser extremadamente cuidadoso de cómo ubicas las cosas en relación contigo, porque al ser un creador y tener dentro de ti la esencia Divina, eso que creas regresará a ti. Se te hará responsable, por ser el autor de la creación, ella regresará a ti.
John-Roger y John Morton

lunes, 14 de enero de 2013

Sabiduría Angelical

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En días pasados, durante un taller que dicté en la ciudad de Bogotá, una joven me preguntó: “¿Espiritualmente hablando, el estudio de los ángeles qué enseñanzas te ha dejado?”. Puedo asegurar que son muchas las bendiciones recibidas y las lecciones aprendidas. A continuación, algunas de ellas.
Todo comienza con la intención
Establecer una intención se asemeja a plantar una semilla. Cada proyecto necesita una intención para su formación. Al permitirnos soñar y “hacer algo” al respecto, como por ejemplo, dar el primer paso, el universo se programa de inmediato en nuestro beneficio y los ángeles comienzan a orquestar las oportunidades que necesitamos.  El abono de esa semilla se relaciona con nuestros pensamientos y las acciones que tomamos en la dirección del logro de nuestras metas, además de la confianza que depositamos en Dios para ver materializado nuestros sueños.
Sobre la felicidad
La felicidad no se encuentra afuera, no depende de otro. Ser feliz o no, es nuestra propia elección. Como hijos de Dios, todos tenemos derecho a ser felices. Precisamente esa es una de las misiones de los ángeles: ayudarnos a ser naturalmente alegres. No importan las circunstancias, aun con lágrimas, la felicidad siempre está en nuestras manos, en la actitud como asumimos cada desafío, admitiendo nuestras vulnerabilidades, aceptando las dificultades como aprendizajes de vida y no como pruebas divinas. Las experiencias vividas son herramientas para el mañana y constituyen el ser que hoy somos. Cada lección se vive, se supera y se continúa con la siguiente.
La inteligencia del corazón
Las respuestas siempre están en el corazón. Allí reside la mayor sabiduría del ser humano, la conciencia más elevada y armoniosa que poseemos. Anteriormente los científicos creían que la inteligencia y la fuente de todo conocimiento era el cerebro. Hoy en día se ha descubierto que el corazón cuenta con la capacidad de “escuchar” al instinto y traducirlo cerebralmente en lo que conocemos como la intuición. En el corazón encontramos la guía divina, la voz de los ángeles. La mente lo complica todo, el corazón saca lo mejor de cada quien. El corazón nos indica cuando vamos por buen camino. Al construir los sueños alrededor del corazón y apoyarnos en él a la hora de tomar decisiones, fluimos y nos conectamos con nuestra esencia.
Co-creadores de nuestras experiencias
Existe un plan divino para cada persona que se basa en el amor, la paz y la luz.  Elegimos lo que debemos aprender, cómo aprenderlo, con quién y en qué periodo de tiempo. Dios además nos regaló el libre albedrío, es decir, la capacidad de elegir. Gracias a ello somos co-directores, co-libretistas y protagonistas de la película de nuestra propia vida. Al alinear lo que pensamos, sentimos y hacemos, con nuestra intención, diseñamos lo que vivimos. También es posible, desde la conciencia y el amor, reescribir el guión en cualquier momento.
Positivismo
Las creencias positivas son la antesala de una vida plena. Sentirse positivos conlleva gran cantidad de beneficios para la salud física, mental, emocional y espiritual. Los ángeles siempre creen en nosotros. De manera que aún en tiempos de duda, sostener la fe permaneciendo optimistas respecto a nosotros y la vida misma, es una manera casi mágica de salir jubilosos de cualquier reto.  De todas formas, los ángeles siempre están disponibles y podemos invocarlos para recuperar la mejor perspectiva en cada circunstancia.
Nada ocurre al azar
Todo tiene una razón de ser. No existen las casualidades ni los golpes de suerte. El universo se mueve bajo perfectas Leyes Espirituales. Cada experiencia, cada persona, cada evento sucede porque así debe ser. Resistirnos o apegarnos a algo o alguien, solo conduce al retraso de nuestro proceso de evolución.
Merecemos lo mejor
Todo padre amoroso desea lo mejor para sus hijos. Disfrutemos al máximo cada instante, haciendo las cosas que nos producen gusto, conectándonos con la satisfacción que se siente y brindándonos todo lo bello y hermoso de la vida. No vinimos al mundo a sufrir. Está bien sentir gozo, invertir en nuestro espíritu, aspirar y considerarnos merecedores de las cosas buenas que Dios tiene para todos por igual.
Siempre estamos apoyados completamente. Eso sí, recordemos pedir ayuda a los ángeles en todo lo que hagamos. Es la voluntad del Padre que todos seamos merecedores de la abundancia y el amor divinos. Todos somos igualmente dignos de recibir la ayuda celestial y es tarea de los ángeles amarnos, protegernos y orientarnos. No requieren de nuestro permiso para amarnos incondicionalmente. Sin embargo, sí necesitan nuestro consentimiento para guiarnos y cuidarnos.
Bendiciones de amor y luz.
Martha Muñoz Losada
Terapeuta en Sanación y Canalización con Arcángeles

viernes, 11 de enero de 2013

Arcángeles, mensajeros de Dios


Los arcángeles son mensajeros de Dios y están ahí para ayudarnos. En cualquier situación que nos encontremos, están listos para asistirnos, al instante! Cada Arcángel tiene su propia Arcangelina, su alma gemela, y llevan cada color del alma y cada chakra, ruedas de energía a nivel espiritual. Si decretáramos y oráramos diariamente, nuestro campo energético estaría vibrando a la frecuencia de cada Arcángel, hasta llegar a vibrar a la frecuencia de Dios. No estamos solos. Compruébalo por ti mismo o misma. NAMASTE!

miércoles, 9 de enero de 2013

Solo es feliz quien se permite ser feliz

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Ser Feliz es, en gran medida, una elección personal.
Y Ser Feliz es una responsabilidad que hay que asumir dedicándole atención plena y prioridad preferente.
No somos más felices porque no sabemos con qué o con cuánto es suficiente para ser feliz.
En más de una ocasión hemos sentido la sensación de plenitud de felicidad con un encuentro, una sonrisa, o una llamada… sin más.
Todos hemos visto personas que, aun no teniendo posesiones, y viviendo en unas condiciones duras, son felices.
Todos hemos asistido a una conversación en que uno acaba diciendo, más o menos, “se puede ser feliz con cualquier cosita…”
La infelicidad se basa, en gran medida, en las inconscientes preocupaciones que todos tenemos.
Sabemos, y le estamos dando vueltas continuamente aunque no nos demos cuenta, que un hijo tiene un problema, que en la casa hay que hacer una reparación, que notamos distante a una amiga, que nos vamos haciendo mayores, que nos falta nuestra amada madre… y eso espanta a la felicidad.
Nos gustaría tenerlo todo y que todo fuera perfecto a nuestro alrededor.
Gastamos demasiada energía, demasiada atención, y demasiado tiempo, en añorar lo que ya no tenemos, lo que no se ha cumplido, lo imposible…
Y ese tiempo que dedicamos a ello podríamos invertirlo mejor en estar presentes en el presente, en disfrutar lo que somos y lo que tenemos a nuestro alcance
La felicidad se manifiesta en los momentos en que nuestra mente no está divagando en sus pre-ocupaciones, en que estamos en contacto solamente con nuestro centro, y cuando no estamos distraídos con otras cosas.
Decimos en muchas ocasiones, de esos que saben ser felices a menudo, que son “unos irresponsables”.
¿Será que es bueno ser “un irresponsable”?
¿Será que a veces nos estancamos en el papel que nosotros llamamos “responsable” y no nos damos permiso para disfrutar la felicidad?
¿Será que a medida que nos vamos haciendo mayores creemos que tenemos que ser serios?
Creo que sólo se es feliz cuando se usa el corazón.
La felicidad no es un asunto de la razón.
Piensa en los momentos en que te hayas sentido absolutamente feliz, y verás que tienen cosas en común: No estabas pendiente de otra cosa más que de aquello que activó tu felicidad, y lo que te produjo felicidad no era algo material.
Comprar un coche nuevo o una nueva casa, un ascenso en el trabajo, gastar dinero, una buena comida en un buen restaurante… eso te produce satisfacción, entusiasmo, placer, euforia, contento, una especie de alegría… y todo eso está muy bien, pero eso no es la felicidad: eso son momentos puntuales en el tiempo que van desapareciendo.
La suma de alegrías, risas, sonrisas, satisfacción, diversión, buen humor, placer… aun no siendo la auténtica felicidad –porque son efímeras- sí que provocan una “sensación” de felicidad, una “sensación” que se parece bastante a la felicidad –que es menos aparatosa, y es más discreta y prudente-; la parte buena es que predisponen en buena medida a ser feliz porque provocan un optimismo que alienta a relacionarse bien con la felicidad.
Ser feliz no es estar alegre, eso ya lo sabemos, si bien estar alegre puede ser una manifestación de ser feliz.
Ser feliz se puede manifestar como una serenidad que no requiere demostraciones externas –aunque se aprecia en la mirada, en la sonrisa y en el aura-.
La felicidad no es eufórica, es casi invisible, porque es un sentimiento interior que se parece más a la paz que a cualquier otra cosa.
Es una satisfacción íntima con uno mismo, resultado de una aceptación de Sí Mismo, y de su pasado y su presente.
Cualquier oposición a la aceptación total impide la manifestación de la felicidad.
Y esa aceptación necesita una comprensión de todo lo que haya hecho uno en el pasado: lo que se pueda calificar como “malo” y lo que haya estado bien. Comprensión de que uno actuó del modo que consideró adecuado o del modo que le permitieron sus capacidades o circunstancias de entonces. Y he escrito “comprensión”, y no “perdón”. Porque no hay nada que perdonar ni auto-perdonarse. Eso sólo mostraría una especie de superioridad y prepotencia del que perdona hoy al que fue ayer.
Ser feliz se basa, básicamente, en encontrarse bien de Autoestima, en tener una buena relación con Uno Mismo, en saber apreciar la vida y sus cosas, en saber renunciar a lo imposible y no obsesionarse con la consecución de utopías, en comprender que no se puede tener todo ni ser el mejor, en saber aceptar y saber renunciar, en darse cuenta de que lo que verdaderamente vale y es importante es cultivar la relación consigo mismo, y admitirse sin condiciones en lo que uno llama equivocadamente sus “imperfecciones” y sus “fracasos”.
Sólo serás feliz si realmente te propones ser feliz y eliminas tus propias oposiciones.
Permítete ser feliz… y serás feliz.
Francisco de Sales, es el creador de la web www.buscandome.es, para personas interesadas en la psicología, la espiritualidad, la vida mejorable, el Autoconocimiento y el Crecimiento Personal

martes, 8 de enero de 2013

Bendiciones para nosotros y para el mundo


Recientemente hablé acerca de un experimento en el cual cinco monos fueron colocados en una jaula con una banana colgando desde el techo en el medio de la misma y una escalera para subir a tomarla. Al principio, los monos intentaron uno a uno subir la escalera para tomar la banana. Pero cada vez que uno de ellos comenzaba a subir, el investigador rociaba con agua fría al mono que ascendía así como a los otros cuatro.
Pronto, los monos aprendieron que si uno de ellos subía la escalera todos sufrían y al final, ninguno de ellos intentó subir de nuevo.
En este punto, el investigador reemplazó a uno de los monos con uno “nuevo” que no sabía nada sobre el agua. Como era de esperarse, tan pronto observó la banana colgando desde el techo, corrió para subir la escalera. Antes que el investigador pudiera rociarlo, los otros cuatro monos se apresuraron a lanzar a ese mono al piso.
Lo mismo ocurrió cuando reemplazaron a otro mono del grupo original con uno nuevo hasta que finalmente todos los monos en la jaula eran “nuevos”. A pesar que ninguno había experimentado el agua fría, cuando un mono nuevo entraba a la jaula e intentaba subir la escalera, lo otros lo lanzaban al piso sin saber realmente el por qué. Ellos sólo sabían que no subían la escalera porque así debía ser.
¿Por qué comparto este experimento? Bueno, básicamente es una poderosa ilustración del pensamiento en el que todos nosotros podemos caer en nuestro trabajo espiritual. Por ejemplo, cuando llegamos por primera vez a un camino espiritual, puede que nos digamos a nosotros mismos: “Wow ¡esto es increíble!”. Emocionados e inspirados, aprendemos, hacemos preguntas, y vamos y le contamos a nuestros amigos y a nuestra familia acerca de nuestro nuevo entendimiento. Al principio tenemos esta energía estimulante.
Sin embargo, después que permanecemos un tiempo perdemos un poco de este deseo. No buscamos más las bananas. Porque no vemos la película completa, aceptamos ciegamente lo que está justo frente a nosotros y no buscamos más. Simplemente aceptamos de alguna manera que no necesitamos ir por las bananas. Hacemos las cosas porque “así debe ser” o simplemente “seguimos la corriente”.
Para nuestra dicha o desdicha, tenemos que entender que si realmente queremos algo en este mundo necesitamos primero tener el deseo por ello. Si queremos estar bien, si queremos dejar una adicción, si queremos cambiar algo en nuestras vidas, grande o pequeño, debemos tener un deseo por eso. Todo comienza con el deseo.
Sabes que dentro de cada uno de nosotros existen dos fuerzas. Está la pequeña Luz dentro de nosotros que nos da un empujón y dice: “No hagas eso”, “ayuda a tu amigo” o “sal de ti mismo y haz esa llamada telefónica”. Y luego tenemos otra voz mucho más fuerte, el Deseo de recibir para sí mismo, la cual dice: “es sólo una vez”, “no te molestará”, “toma un poco más para ti”, “engaña a tu pareja, ni siquiera lo sabrá”, o “¿quién te verá allí?”. La pregunta es: ¿qué lado estás escuchando?
Está época del año es la oportunidad perfecta para preguntarnos nuevamente: ¿De qué se trata todo? ¿Se trata de unos cuantos momentos de placer o de ser victoriosos frente a ese placer? ¿Cuál es nuestro trabajo en este mundo? ¿Estamos haciendo las cosas que traerán Luz para nosotros y para otros? ¿Vamos en busca de las bananas o nos hemos resignado a esa voz alta en nuestra cabeza que dice: “de todos modos, no importa”?
Cada uno de nosotros tiene una pequeña Luz que se extinguirá en 20, 30, 50 años o más. Que en esta época de festividades todos desarrollemos un verdadero deseo que resulte en bendiciones para cada uno de nosotros y para el mundo.
Karen Berg

sábado, 5 de enero de 2013

Invocación a San Miguel Arcángel


Que tu poderosa fuerza nos guarde, nos proteja y nos mantenga a salvo a cada hora. Comparte este video con tus familiares para que también gocen de esta hermosa protección.

jueves, 3 de enero de 2013

LA LUZ DE NUESTROS FRACASOS

Te sorprendería saber cuántos de los grandes sabios fueron considerados como los que menos tendrían éxito en los inicios de su jornada.
De hecho, generalmente los estudiantes que fallaban eran los que se convertían en las almas más justas (Tzadikim) y en los líderes de su generación.
El secreto de ellos fue: saber que incluso si fracasaban una y otra vez, el fracaso no los hacía inferiores.
Siempre hay Luz en nuestros fracasos porque nos acercan un paso más para alcanzar nuestra meta.

Yehudá Berg

martes, 1 de enero de 2013

MAS ALLA DE NUESTRA BASURA

Una buena señal de que estás en el camino correcto es cuando comienzas a ver más de tu basura. Comienzas a notar el ego jugando y cómo le permites que se aferre a ti y a tus interacciones con otros.
Ver nuestra basura nunca es fácil. Pero lo que hacemos después de verla es lo que marca la diferencia.
Afligirnos, deprimirnos o entristecernos no nos ayudará a cambiar, así que eso es una pérdida de tiempo. Por otro lado, podemos sentirnos agradecidos por tener la claridad para ver qué es lo que necesitamos cambiar para que nuestras vidas puedan mejorar.
¡Imagina si pudiéramos hacer el cambio para que el ver nuestra basura se vuelva una parte maravillosa del proceso!
Si no podemos ver nuestra basura, no podemos alejarnos de ella e ir hacia la Luz.
Yehudá Berg