Para tener una relación sana debemos
aprender el desapego, pues no es recomendable estar con alguien por miedo a
estar solo o para que nos haga feliz. Al escoger estar con una pareja debemos
sentirnos felices y seguros solos o acompañados, así no cargamos la relación
con expectativas que no permitirán su crecimiento.
El desapego o ‘soltar’ es una lección
esencial de aprender, pero es un concepto difícil de asimilar y entender, por
eso comparto algunos puntos que aclaran lo que es y lo que no es:
* Soltar no es mostrarnos indiferentes
y actuar como que la otra persona no nos importa, sino hablar con honestidad y
una vez expuesto lo que sentimos dejar que la otra persona escoja lo que siente
en el momento.
* Soltar no es cortar los vínculos
para alejar a alguien de mi vida, sino respetar a los demás como son y tomar
conciencia de que no podemos controlar a nadie.
* Soltar no es ser pasivo, sino actuar
sin expectativas y aprendiendo las lecciones que los acontecimientos presentan.
* Soltar no es sentirnos impotentes,
sino saber que el resultado final está en otras manos y aceptar ese hecho.
* Soltar no es no planear nada, sino
tomar el día y lo que nos sucede como se presenta y apreciarlo aunque sea
diferente a lo que planeamos.
* Soltar no es abandonarnos y actuar
como que nada me importa, sino aceptar que aunque tengamos debilidades y temas
por sanar daremos lo mejor de nosotros mismos.
* Soltar no es no hacer nada por
nadie, ni hacerlo todo, sino comprometerse con ellos, darles el coraje y el
apoyo necesario para que alcancen su potencial, pero honrar lo que finalmente
escojan hacer.
* Soltar no es desechar el pasado y lo
que hemos aprendido de él, sino crecer en el presente para lograr un mejor
futuro.
* Soltar es dejar que cada uno se haga
cargo de su propio destino.
* Soltar es aceptar a los demás con
sus luces y sus sombras.
* Soltar es aceptar lo que la vida nos
trae.
* Soltar es liberar la resistencia a
lo que no deseamos experimentar.
* Soltar es liberar las expectativas,
tanto las positivas como las negativas.
* Soltar es amar sin imponer
condiciones.
Cuando ya hayas logrado el desapego,
la vida te regresará a aprender a estar con alguien. Porque, a veces, llegamos
a sentirnos tan bien solos que entonces nos da miedo abrir el corazón al amor y
volver a sentirnos vulnerables.
Aprender el verdadero desapego
requiere asumir el riesgo de estar feliz con alguien y sin ese alguien.